Pront: “El otro norte”

Cuando era adolescente, tuve mi primera experiencia laboral, y fue con el cargo de office boy, en una empresa bastante conocida en el país. Y en esa oportunidad tuve la oportunidad de conocer gente muy interesante y con mucha experiencia. Personas a las cuales me acerqué con la intensión de aprender de ellas.

En mucha de las conversaciones que tenía, con los gerentes y los jefes de departamento, ellos siempre me decían que uno en la vida laboral, académica y personal, debía trazarse metas, y después de colocarse esas metas, uno debía, trabajar, ser responsable, constante y perseverante, en conseguir las metas propuestas.

Y efectivamente eso, fue lo que hice, hice un estudio de mi situación, vi lo que quería hacer y lo que me hacía feliz, y enfilé todas mis fuerzas en conseguir esas metas. Pero, en el camino, hubo cambios, ya que me conseguí, con nuevas filosofías, nuevas lecturas, nuevas formas de ver las situaciones y de ahí nacieron nuevos intereses, que me hicieron dudar mucho del camino que estaba siguiendo en la vida.

Y en medio de esa disyuntiva personal, me conseguí a una persona muy especial, y en una conversación con ella, le planteé mis dudas. Y ella simplemente me dijo: “Tenías un rumbo fijado, con la idea de llegar a una meta. Y si lo ves bien, la meta final, lo que quieres para tu vida, no cambia. Así, que lo que debes entender, es que puedes alcanzar esa misma meta cambiando el camino. Así que cambia tu norte, fija una nueva ruta y cumple tu meta final siendo feliz en el proceso”.

Al final, le hice caso, cambié el norte, seguí otro camino, y finalmente conseguí lo que buscaba al final del trayecto. Y en esa experiencia aprendí, que no hay caminos únicos en la vida, sino que nuestro norte cambia, a la medida, que nosotros vamos viviendo, y creciendo en lo cultural, lo académico, lo laboral y lo personal.

Muchas gracias por leerme.

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Pront: "The Other North”

When I was a teenager, I had my first work experience, and it was with the position of office boy, in a well-known company in the country. And on that occasion I had the opportunity to meet very interesting and experienced people. People I approached with the intention of learning from them.

In many of the conversations I had with managers and heads of departments, they always told me that one in work, academic and personal life, should set goals, and after setting those goals, one should, work, be responsible, constant and perseverant, in achieving the proposed goals.

And indeed that's what I did, I did a study of my situation, I saw what I wanted to do and what made me happy, and I focused all my strength on achieving those goals. But, along the way, there were changes, since I got myself, with new philosophies, new readings, new ways of looking at situations and from there new interests were born, which made me doubt a lot about the path I was following in life.

And in the midst of that personal dilemma, I got myself a very special person, and in a conversation with her, I raised my doubts. And she simply said to me: “You had a fixed course, with the idea of reaching a goal. And if you look at it well, the final goal, what you want for your life, does not change. So, what you should understand is that you can achieve that same goal by changing the path. So change your north, set a new route and fulfill your ultimate goal being happy in the process.”

In the end, I listened to him, changed the north, followed another path, and finally got what I was looking for at the end of the journey. And in that experience I learned that there are no unique paths in life, but that our north changes, to the extent that we are living, and growing culturally, academically, professionally and personally.

Thank you very much for reading me.

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