Eso fue suerte!
Todos hemos escuchado alguna vez esta frase, sea porque nos la han dicho, la hemos dicho a otros o a nosotros mismos: Si no estudiamos lo suficiente para un examen pero igual salimos muy bien, si conocimos a una persona que luego sería muy importante en nuestras vidas, si nos ganamos la lotería o fuimos aceptados en el trabajo soñado. Es común que todas estas cosas sean atribuidas a la suerte.
De allí una pregunta que algunas personas se hacen ¿cuánto es mío y cuánto es azar/aleatoriedad/suerte?
Para responder a esta pregunta, lo primero es saber que hay cosas que están bajo nuestro control y hay cosas que no.
De las cosas que están bajo nuestro control destaca cómo nos comportamos y lo que hacemos. A veces subestimamos esto y, de alguna manera, "nos dejamos llevar" por otros. Sin embargo, la verdadera forma de tomar el toro por los cuernos en nuestra vida es fijarnos en lo que decidimos hacer y lo que, finalmente, llevamos a cabo.
La variedad de cosas que se escapan de nuestro control es bastante amplia. De hecho, me enfoqué al inicio es cosas principalmente positivas, pero la pregunta se puede hacer en el sentido opuesto: ¿Qué, de lo malo que me ha ocurrido, ha sido una desgracia/infortunio, y qué ha sido una consecuencia de mis actos?
No son preguntas para llevarnos a la rumia y al sobrepensar excesivo, pero tener claridad de cómo juegan e interactúan ambos elementos (lo que depende de mi y lo que no) nos empodera, por un lado, y, por el otro, nos alivia: hay situaciones que no dependen de mi, no son un castigo, no se trata se merecimiento o no, ni de estar salado. Lo que no depende de mi puede pasar de una forma o de otra.
Sin ánimos de sonar como libro de autoayuda, hay una buena porción de tu vida que está en tus manos. No lo dejes todo al destino, al "cuando llegue veremos". Fíjate en lo que haces y en las consecuencias de lo que haces.
That was luck!
We have all heard this phrase at some time, either because it has been said to us, we have said it to others or to ourselves: If we did not study enough for an exam but we still did very well, if we met a person who would later be very important in our lives, if we won the lottery or were accepted in the job we dreamed of. It is common that all these things are attributed to luck.
Hence a question that some people ask themselves: how much is mine and how much is chance/randomness/luck?
To answer this question, the first thing to know is that there are things that are under our control and there are things that are not.
Of the things that are under our control, how we behave and what we do stand out. Sometimes we underestimate this and, in a way, “let ourselves be led” by others. However, the real way to take the bull by the horns in our life is to look at what we decide to do and what we ultimately carry out.
The variety of things that are beyond our control is quite wide. In fact, I focused at the beginning on mainly positive things, but the question can be asked in the opposite direction: What, of the bad things that have happened to me, has been a misfortune/fortune, and what has been a consequence of my actions?
These are not questions to lead us to rumination and excessive overthinking, but having clarity on how both elements play and interact (what depends on me and what does not) empowers us, on the one hand, and, on the other, relieves us: there are situations that do not depend on me, they are not a punishment, it is not a matter of deserving or not, nor of being salted. What does not depend on me can happen in one way or another.
Without wanting to sound like a self-help book, there is a good portion of your life that is in your hands. Don't leave it all to fate, to “when it comes we'll see”. Look at what you do and the consequences of what you do.
Todas las imágenes de esta publicación son de mi autoría, editadas en snapseed. El contenido también es original y propio.
All images in this post are my own, edited in snapseed. The content is also original and mine.
For the best experience view this post on Liketu
De allí que sea vital pensar muy bien antes de actuar, muchas cosas malas nos pasan por las decisiones que tomamos, pero así es la vida una montaña rusa llena de aprendizajes. Saludos.
Tu reflexión es muy acertada y plantea una perspectiva equilibrada sobre la suerte y la responsabilidad personal. Es fácil atribuir todo al azar, pero reconocer lo que está bajo nuestro control nos da poder sobre nuestras acciones y decisiones. Además, aceptar que hay cosas que simplemente escapan de nuestras manos nos ayuda a liberarnos de culpas innecesarias. Un enfoque realista y motivador.
Saludos ❤️
Ciertamente una parte depende de nosotros y la otra de las oportunidades que se nos presenten, siempre debemos estar preparándonos con las herrmientas necesarias para el día que se nos presente la oportunidad y así no dejarla escapar, para mi no es suerte es crecimiento personal.