Planificar nuestro día, planificar nuestra vida

ESPAÑOL

¿Para qué tomar 5 minutos del día y destinarlos a organizar las actividades que queremos/debemos/necesitamos hacer? ¿Cuál es el sentido de escribir en una hoja, en un calendario virtual o en una agenda física la estructura de nuestro día?

Algunos pensarán que es suficiente con tener una idea en la mente de estas actividades diarias, y que estas se pueden realizar una a una, sin orden o estructura específica, hasta completarlas.

Esta metodología puede funcionar, considero, ante una cantidad de tareas limitadas. Sin embargo, ponerle check a las actividades realizadas y realizarlas realmente no es el único beneficio de la planificación.

Cuando volcamos sobre un papel la organización de nuestro día, en cierta forma pasamos nuestras ideas, planes, preocupaciones y/o pendientes a algo físico y tangible. De alguna manera, esto ayuda a liberar un poco de la carga mental y a concentrarnos en lo que estamos haciendo, sin pensar en qué es lo próximo o lo que falta. Incrementando así nuestra creatividad y productividad. Nos sentiremos mentalmentes más "frescos" para continuar avanzando en nuestro día.

A veces sobreestimamos las posibilidades de nuestra memoria, hasta que un pensamiento repentino nos viene al final del día y pensamos "Ay, hoy tampoco pude hacer tal cosa". Postergarmos los pendientes que no son urgentes y sin darnos cuenta, fácilmente pueden pasar semanas o meses.

Por supuesto, tener una planificación de nuestro día no es una garantía de que realizaremos todos y cada uno de los aspectos que allí escribimos. Pero sí que puede ser de gran apoyo para nuestra motivación y atención. Sobre todo esta última, que a veces está dispersa y se entretiene con actividades más rápidas y estimulantes, hasta que nos vemos inmersos en un espiral imparable de pérdida de tiempo, insatisfacción y cansancio.

Es importante recordar que la planificación de nuestro día también implica la disposición de nuestra energía y tiempo. Por eso, algunas estrategias como la técnica pomodoro, las alarmas, los tiempos límite para ciertas actividades o el ejercicio y sueño de calidad serán otros elementos que aportarán un beneficio cuando de organizar nuestra día se trata.

Desgraciadamente, la planificación puede volverse nuestra enemiga, especialmente, cuando la volvemos rígida o irrealista. Será rígida cuando los parámetros de cumplimiento se vuelven estrictos e inflexibles, y no admiten ningún tipo de cambio.
E irrealista, cuando no se ajusta a nuestras capacidades y recursos actuales, por ejemplo, exigirnos una cantidad absurda de tareas en un mismo día, o disponer tiempos insuficientes para la consecusión de las mismas.

La planificación es como ese itinerario o esa brújula que nos guía hacia un destino deseado, y cada día representa un pacito hasta ese destino.

Así, la vida que queremos vivir no llega de forma fortuita, al contrario, requiere de algo de voluntad y organización.

Esta publicación responde a la iniciativa propuesta por la Comunidad Humanitas: 1 tema para cada día del mes de Julio. Te invito a participar y a compartir tus ideas sobre los diferentes temas propuestos, de la manera como desees y en el orden que gustes. Te comparto la publicación de la iniciativa para que revises las reglas de participación

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ENGLISH.

Why take 5 minutes of the day and allocate them to organize the activities we want/should/need to do? What is the point of writing on a sheet of paper, in a virtual calendar or in a physical agenda the structure of our day?

Some may think that it is enough to have an idea in mind of these daily activities, and that these can be done one by one, without any specific order or structure, until they are completed.

This methodology can work, I believe, with a limited number of tasks. However, putting a check on the activities performed and actually doing them is not the only benefit of planning.

When we put down on paper the organization of our day, in a way we transfer our ideas, plans, worries and/or pending tasks to something physical and tangible. In a way, this helps to release some of the mental burden and focus on what we are doing, without thinking about what is next or what is missing. Thus increasing our creativity and productivity. We will feel mentally “fresher” to continue moving forward in our day.

Sometimes we overestimate the possibilities of our memory, until a sudden thought comes to us at the end of the day and we think “Oh, I couldn't do that today either”. We procrastinate on non-urgent tasks and without realizing it, weeks or months can easily go by.

Of course, having a plan of our day is not a guarantee that we will accomplish each and every one of the aspects we wrote there. But it can be a great support for our motivation and attention. Especially the latter, which is sometimes scattered and entertained with faster and more stimulating activities, until we are immersed in an unstoppable spiral of wasted time, dissatisfaction and fatigue.

It is important to remember that planning our day also involves the disposition of our energy and time. Therefore, some strategies such as the pomodoro technique, alarms, time limits for certain activities or exercise and quality sleep will be other elements that will provide a benefit when it comes to organizing our day.

Unfortunately, planning can become our enemy, especially when we make it rigid or unrealistic. It will be rigid when the parameters of compliance become strict and inflexible, and do not admit any type of change.
And unrealistic, when it does not adjust to our capacities and current resources, for example, to demand an absurd amount of tasks in the same day, or to have insufficient time for the achievement of them.

Planning is like that itinerary or compass that guides us towards a desired destination, and each day represents a step towards that destination.

Thus, the life we want to live does not come fortuitously, on the contrary, it requires some will and organization.

This publication responds to the initiative proposed by the Humanitas Community: 1 theme for each day of July. I invite you to participate and share your ideas on the different topics proposed, in the way you want and in the order you like. I share with you the publication of the initiative so that you can review the rules of participation.