El espacio necesario para lo espontáneo

ESPAÑOL

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Ser una persona organizada, capaz de planificar los recursos para lograr un objetivo determinado es un aspecto funcional y bastante positivo, que puede beneficiarnos mucho tanto en nuestra vida personal (metas, propósitos, relaciones interpersonales, hábitos) así como en nuestra vida profesional (trabajo, crecimiento en nuestra área de interés, etc.). Requiere de una serie de habilidades que pueden resumirse en: gestión adecuada del tiempo, autoconocimiento, trabajo proactivo, identificación y disminución de variables distractoras, planificación de actividades, disciplina y responsabilidad para cumplir con lo pautado más allá de las necesidades o intereses del momento. Son variables que se pueden aprender y fortalecer de forma práctica, y que, como hemos visto, puede traernos beneficios, ahorrarnos tiempos y permitirnos obtener retribuciones de diferentes tipos.

Al mismo tiempo, es importante tener presente que la vida en sí misma dista mucho de ser un manual con reglas y leyes que debemos cumplir en un formato de checklist, hasta completar cada día. Independientemente de los niveles de planificación y organización que manejemos, incluso, de los niveles de orden y de estructura de los espacios en los que nos desenvolvemos y de las personas con las cuales compartimos (escuela, trabajos, pareja, amigos...), debemos recordar que la espontaneidad es siempre una posibilidad que aparece para irrumpir, o enriquecer nuestra vida, dependiendo de cómo elijamos ver e interpretar este tipo de situaciones.

Independientemente de lo mucho o poco que nos agrade este punto, y del nivel de control interno y externo que querramos manejar en cada aspecto de nuestra vida, siempre habrá un espacio para aquello que en algún momento forma parte de la incertidumbre y que luego, en el presente, pasa a ser un imprevisto que no habíamos estipulado pero que ocurre, más alla de todo el orden y estructura.

La forma en cómo asumamos estas situaciones puede afectar, en menor o mayor medida, nuestro estado de ánimo. Para algunas personas, por ejemplo, será extremadamente difícil lidiar con todo aquello que no se había contemplado desde el inicio, con las eventualidades propias de la vida. Para otras, será una situación que se comprende como parte de la vida, y más allá de los bajos o altos niveles de organización, perfeccionismo y estructura, entienden que son cosas que se escapan de su control, buscándole así el aprendizaje y el aspecto positivo a cada cosa que ocurre, esté o no entre su planificación.

El otro extremo, el de la espontaneidad absoluta, también tiene sus matices. Ciertamente, en algunos casos tener esta perspectiva de vida llega a ser funcional para el contexto en el que está la persona. Sin embargo, y como he desarrollado en publicaciones anteriores, una pequeña agenda, algo de orden y rutina para nuestros días es necesario y nos ayuda a seguirle el ritmo a todo aquello que nos interesa y nos hemos propuesto lograr en el corto, mediano y largo plazo.

Para todo esto, será muy importante no solo conocernos y entendernos a nosotros mismos, sino también comprender el funcionamiento natural de la vida. Los niveles de estructura son como un continuo, algunos serán más estructurados, otros menos, pero siempre, siempre siempre hay que dejarle un espacio a la espontaneidad, lo inesperado. Y algunas veces entender que estos aspectos también pueden disfrutarse y de ellos también hay mucho que aprender.


ENGLISH
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Being an organized person, capable of planning resources to achieve a given objective is a functional and quite positive aspect, which can benefit us a lot both in our personal life (goals, purposes, interpersonal relationships, habits) as well as in our professional life (work, growth in our area of interest, etc.). It requires a series of skills that can be summarized as: proper time management, self-knowledge, proactive work, identification and reduction of distracting variables, planning of activities, discipline and responsibility to comply with what is scheduled beyond the needs or interests of the moment. These are variables that can be learned and strengthened in a practical way, and that, as we have seen, can bring us benefits, save us time and allow us to obtain different types of rewards.

At the same time, it is important to keep in mind that life itself is far from being a manual with rules and laws that we must follow in a checklist format, until we complete each day. Regardless of the levels of planning and organization that we manage, including the levels of order and structure of the spaces in which we develop and the people with whom we share (school, work, partner, friends ...), we must remember that spontaneity is always a possibility that appears to break into, or enrich our lives, depending on how we choose to see and interpret such situations.

Regardless of how much or little we like this point, and the level of internal and external control we want to manage in every aspect of our life, there will always be a space for that which at some point is part of the uncertainty and then, in the present, becomes an unforeseen event that we had not stipulated but that occurs, beyond all the order and structure.

The way in which we assume these situations can affect, to a lesser or greater extent, our state of mind. For some people, for example, it will be extremely difficult to deal with everything that had not been contemplated from the beginning, with the eventualities of life. For others, it will be a situation that is understood as part of life, and beyond the low or high levels of organization, perfectionism and structure, they understand that these are things that are beyond their control, thus looking for the learning and the positive aspect of everything that happens, whether or not it is part of their planning.

The other extreme, that of absolute spontaneity, also has its nuances. Certainly, in some cases having this perspective of life becomes functional for the context in which the person is. However, and as I have developed in previous publications, a small agenda, some order and routine for our days is necessary and helps us to keep pace with everything we are interested in and we have proposed to achieve in the short, medium and long term.

For all this, it will be very important not only to know and understand ourselves, but also to understand the natural functioning of life. The levels of structure are like a continuum, some will be more structured, others less, but we must always, always leave room for spontaneity, for the unexpected. And sometimes understand that these aspects can also be enjoyed and from them there is also much to learn.



Todas las imágenes de esta publicación son de mi autoría, editadas en snapseed. El contenido también es original y propio.

All images in this post are my own, edited in snapseed. The content is also original and mine.


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